por Andy Lloyd
con los agradecimientos a Korbyn Ero
20 de Noviembre 2004
traducción por
Enrique Pérez Porter
de
DarkStar1 Website
Homo Floresiensis |
Recientemente al Mundo se la ha permitido conocer el fantástico
secreto del descubrimiento de una nueva, pequeña especie humana
conocida para el ambiente científico como Homo Floresiensis.
El hallazgo se efectuó en
Septiembre del 2003 en las cavernas Liang
Bua en la isla de Flores, en Indonesia Central. Los hechos
emergentes han puesto a los académicos antropológicos, de cabeza.
Los restos son de adultos que medían apenas 1 metro de altura, de
donde fueron apodados “Los Hobbits”. Sus cráneos dan cabida a un
cerebro a 380 cc, menos que el límite previamente establecido para
denotar humanidad. Aun a pesar de sus pequeños cerebros, los
'Hobbits' eran capaces de emplear herramientas y usar fuego; y
evidentemente comían su carne, cocida (1).
Homo Floresiensis muestra notables semejanzas con el antiguo
Homo Erectus, aunque los restos han sido fechados entre 95000 y 13000 años
atrás. Esto es por completo inesperado para una nueva especia humana
que parece haber vivido hasta el final de la última Edad de Hielo,
mucho más reciente que el Neanderthal.
Esta mezcla de elementos evolutivos implica la necesidad de un
completo re-pensamiento de la evolución humana.
El tiempo de la presunta desaparición de estos Hobbits resulta
interesante para los investigadores de anomalías. La fecha 10.500
a.C. es por lo general situado como un período de gran catástrofe.
Se dice que señala el final de una perdida Era Dorada de
civilización, por lo general asociada con una súper raza trans-global, o de
Atlántida. ¿O quizá también la destrucción del
igualmente
Continente Perdido de Mu, ubicado en el Océano Pacífico,
que se dice ocurrió a una cultura mundial dominante hace unos 25 mil
años?
Churchward afirma que el Disco Alado más temprano es aquel de
los registros Naacal, con el cual él presentó evidencia de
Mu en
1868 (2).
La fecha de 10.500 A.C. también puede asociarse con el retorno de la
Estrella Oscura Nibiru. Si Nibiru fue la
Estrella Mesiánica con una
órbita de ~3600 años entonces vino alrededor del 10.880 A.C., lo
cual estaría dentro del “error experimental”. Sin embargo existe
otro escenario a considerar.
Uno puede haber notado con interés que la bizarra órbita del
planetesimal Sedna es 10.500 años.
Nibiru debe tener eventualmente
una órbita resonante con este cuerpo (3 Sars), lo que tiene una
correlación inesperada entre la Era Mesiánica y el fin del Antiguo
Egipto Zep Tepi. Esta “coincidencia” es otra razón para llamar la
atención sobre el increíble Sedna.
Sería muy prematuro abalanzarse sobre estas proyecciones para
establecer un enlace entre los Hobbits y la Estrella Oscura, ¿Por
qué? Porque el hecho que la data de los fósiles del Homo Floresiensis llegue hasta alrededor del 11.000 A.C. en una caverna,
no implica una seguridad automática que pueda ser dicho que toda la
raza de esta pequeña gente desapareció en este punto del tiempo
(como es la más bien liviana conclusión de toda la comunidad
científica...) Pero, ¿quién sabe? Quizá esto pueda proveer evidencia
de la Catástrofe; posiblemente de una gran caída de agua que barrió
las islas.
Otra coincidencia, en una admitida aunque algo menor escala, se
halla al investigar más acerca de la isla Indonesia de Flores, una
unión con el simbolismo de la Estrella Oscura Nibiru.
El Simbolismo Nibiruano en Flores
Algún tiempo atrás Korbyn Ero me hizo llegar algunas imágenes
interesantes de una pieza para la cabeza que muestra simbolismo nibiruano, cuya estructura la he descrito muchas veces en mi libro. El bote (abajo) se ve adornado por siete aves,
cada una situada sobre sus respectivos “mástiles”.
Esta pieza para la cabeza es de la Isla de Flores. En razón que las
imágenes fueron obtenidas de literatura publicada por un museo de la
ciudad de Korbyn, Houston, por error asumí que se trataba de un
artefacto de alguna tribu local indígena de Texas, y planifiqué
describir el hallazgo en un ensayo acerca de las creencias de los
Indios Norteamericanos (como el Trueno, etc.). Pero por supuesto
viene de Indonesia, como Korbyn me lo señaló amable y recientemente.
Y, algo importante, de la misma isla de los Hobbits...
Fotos de la corona de Flores, tomadas de la Guía de Visitantes del
Museo Fine Arts, Houston |
La foto del
Raja se titula Raja Yoseph Djoewa Dobe Ngole
(1902-1972) de Boawae, Flores |
“De acuerdo a la tradición oral, esta magnífica corona tiene una
antigüedad de 10 generaciones. Fue una herencia sagrada empleada por
los nobles Nage para asegurar continuidad en la prosperidad del clan
y de la aldea. La sección en forma de creciente puede representar
una nave ancestral mítica, mientras los siete mástiles derivan de
antiguos tocados para el cabello”
(Museo de Fine Arts, Houston)
Sólo para enfatizar que el mundo pudo haber sido un lugar mucho más
pequeño incluso una Era atrás, comparemos la corona de Flores con un
ejemplo típico de simbolismo celestial del antiguo Egipto, como se
muestra en el Louvre en París:
Aquí tenemos el disco rojo dentro de las clásicas alas abiertas, con
un escarabajo y un par de uraei. Déle un vistazo más cercano a la
barca celestial que aparece en la sección debajo de nuestro Disco
Alado. El frontispicio de la barca es también un globo rojo, el cual
es objeto de reverencia del espíritu de Ba delante de él (una
persona bastante pequeña, qué interesante) Esto a mi mente le
muestra el interés de Espíritu en el concepto de Nibiru, el cual es
simbolizado por la barca celestial como un todo.
Nibiru es el nombre del planeta perdido en nuestro Sistema solar,
pero su simbolismo se complica por el hecho que posee 7 lunas,
haciendo un total de 8 cuerpos en su sistema.
Su apariencia es por lo tanto algo compleja, y los contenidos de la
barca en este diagrama lo reflejan con exactitud. La identidad
general de la barca celeste se denota por el globo rojo del casco,
lo que indica Nibiru. La figura dentro del Kartouche central de la
barca es el Señor Celestial del sistema Nibiru, que toma la forma
física de la Estrella Oscura, un planeta múltiple y masivo como
Júpiter.
Esta identidad se clarifica más debido a la cruz roja, o emblema
tipo ankh sobre la figura. Las otras siete imágenes equivalen a las
7 “estrellas” acompañantes, o lunas, algunas de las cuales se
completan con jeroglifos, lo que quizá indica su primacía dentro del
propio sistema planetario de Nibiru. La “barca”
unifica los
componentes en un solo sistema que se desplaza a través de los
cielos.
El simbolismo general está además firmemente hermanado con el Disco
Alado del artefacto egipcio, lo cual está en plena concordancia con
la tesis original de
Zecharia Sitchin.
Otros planetas en nuestro Sistema solar podrían ser descritos de
forma similar; una lancha que contenga un par de figuras podría
representar la Tierra y la Luna; una barca que contenga un
Señor
dominante (en un Kartouche) con otras cuatro figuras podría denotar
a Júpiter y sus cuatro satélites galileanos. Y así. Este tipo de
análisis es objeto de comprensión científica del Sistema solar desde
el punto de vista de los antiguos egipcios. ¿Podría quizá extenderse
a otros Sistemas solares, por ejemplo, Sirio?
Así pues, ¿es la corona de Flores otro ejemplo del
Disco Alado, esta
vez en el Sudeste de Asia? Si es así, su origen debe ser muy antiguo
sin duda; quizá asociado con una especie humana completamente
diferente...
Actualización
Andy Lloyd, Diciembre 7, 2004
El descubrimiento del homo floresiensis sigue generando
controversia. Las reliquias descubiertas en las cavernas de
Liang
Bua de la isla de Flores se hallan actualmente bajo llave, a la
espera de futuros análisis científicos de este hallazgo tumultuoso.
Los restos del “hobbit” fueron llevados a un académico indonesio, el
Profesor Teuku Jacob de la Universidad Gadjah, en Jakarta, por un
miembro del proyecto original. El Profesor Jacob, que tiene una
reputación muy bien ganada de curatorship, ha generado un problema
al rehusarse devolver los restos. Más aun, el sostiene que el homo floresiencis no es una especie humana por derecho propio, sino una
forma pigmea de humanos que sufren de microcefalea (3).
Los intentos de persuadirlo para devolver los restos hasta ahora han
fallado, y se teme que el empleo de una mano fuerte pueda impedir
futuras excavaciones en las cavernas. Se dice que el Profesor Jacob
firmó un acuerdo para devolver las reliquias el 1º de Enero del
2005.
Otra
cueva en Flores está generando controversia, esta vez por lo
que podría ser encontrado aun con vida. Los habitantes locales
tienen muchas historias que contar en relación a la gente pequeña
que alguna vez habitó en las cavernas del volcán Ebulobo, a 2100
metros de altura, y, de manera increíble, un anterior jefe de la
aldea de Boawae en Flores dice que una mujer de un metro de altura
fue encontrada recientemente en el área. Los científicos
involucrados en la excavación del homo floresiensis se mantienen con
una cuidada mente abierta en relación entre el hallazgo
paleontológico y el histórico folklore del área:
"Un paleontólogo holandés, el
Dr Gert van den Bergh, miembro del
equipo, fue a quién primero se le mostró la cueva, hace más de una
década, luego de escuchar historias del folclor de Ebu Gogo, que
significa “abuela que come de todo."
La gente que vive cerca del volcán le contó la consistente historia
de una criatura peluda que devora todo lo que pueda agarrar con sus
largos dedos. Los aldeanos toleraron los robos de comida hasta que
la criatura de Ebu Gogo comenzó a robar guaguas y se los comía
también. Entonces la emprendieron contra la pequeña gente,
forzándolos a salir de las cavernas con paquetes de pasto ardiente.
Van den Bergh desechó los cuentos como si fueran similares a los de
leprechauns y elfos, hasta que los huesos del hobbit fueron
hallados.” (4)
Posiblemente este remolino de controversias explica el
comportamiento errático de ciertos académicos indonesios. Como la
controvertida
Starchild Skull (Cráneo del Niño de las Estrellas), el
único modo para establecer la verdad es efectuar las pruebas
científicas, particularmente las de ADN.
Hay algo de ironía aquí. El Cráneo del Niño de las Estrellas esta
disponible para tal examen, pero falta dinero, ya que el homo floresiensis tiene a los paleontólogos mundiales clamando por
examinar el hallazgo, pero puede esto terminar siendo acallado para
el mundo...
Update
Andy Lloyd, 23rd September 2005
The BBC's flagship science programme, Horizon, recently looked at
the discovery of the 'Hobbit', and the controversy it has created in
the world of academic palaeontology(5). Horizon has a tendency to
side with the more conservative wing of science, effectively
debunking theories that venture beyond the mainstream. But on this
occasion, the team who had discovered homo floresiensis, and
championed the find as an entirely new species of human, seemed to
come out on top.
Various academics, clearly uncomfortable with the ramifications of
the discovery, had looked into other possibilities to explain it
away. Professor Jacob, in Indonesia, had sought out examples of
pygmy humans among the communities in the immediate locality of the
Liang Bua caves. Finding some relatively short folk, he declared the
matter settled: the indigenous peoples of the area were naturally
fairly little, and it only took a single case of microcephaly in a
pygmy human to provide us with the homo floresiensis specimen of
18,000 years ago.
This idea was also
favored by several Western academics. Between
them they set out to show that a precedent existed among the
historical human population for a 3 foot high person with a minute
brain capacity. Again, such a person would have had an extreme
microcephalic pathology.
Surprisingly, perhaps, they managed to show that microcephalic human
brains did not show the kinds of distorted forms normally associated
with advanced pathology. This then implied that the seemingly normal
shape of the homo floresiensis brain (recreated by modeling the
inside skull case) could not actually rule out microcephalic
pathology in that specimen.
These arguments seemed to cast a dark shadow over the exuberant
claims of the field team. The skeptics claimed that 'critical
faculties had been suspended' during the media furore over the
discovery. This find was, they argued, nothing more than a
microcephalic pygmy human, and the discovering team had made a
terrible, and professionally embarrassing, mistake.
The field team were in trouble, particularly after the rather
ignoble argument with Professor Jacob over possession of the remains
of homo floresiensis. They needed to find a second specimen to
disprove the skeptics. And, it turned out, they had just a specimen
in the form of a second lower mandible. This relic had the same
abnormal structure as the first, indicating that homo floresiensis
was not an isolated case. The microcephalic pygmy argument could not
hold water in the face of two such specimens found in such close
proximity. The odds of such an event occurring would be astronomical.
Homo floresiensis clearly does not fit into the evolutionary
structure established by paleontology. If this new species evolved
from groups of homo erectus isolated in Indonesia, then they must
have worked out ways of traveling between islands (principally from
Java to Flores). The technological skills exhibited by their stone
tools alone are also not in keeping with their brain sizes, at least
according to anthropological theory. But such is life! Science has
always had to adapt to new evidence, and bizarre facts which
challenge pre-existing assumptions held dear by academics.
My gut feeling is that this discovery will pass into the history
books of science as another remarkable landmark which was initially
challenged tooth and nail by the establishment.
The team, keen to discover more specimens of this new human species,
have traveled back to the island of Flores to plan more digs.
However, they are not allowed back into the Liang Bua limestone
caves which are now closed to further investigation. This means that
their work starts from scratch at a new site, and may take a decade
to yield new results. It seems as though controversy and science are
not happy bedfellows.
Referencias
1) W. Knight & R. Nowak "Meet our new human relatives" New Scientist
págs 8-10, 30 Octubre 2004 2) James Churchward "The Lost Continent of Mu" Futura
3) Stephen Cauchi "Hobbits locked away as scientists argue" 26th
November 2004
http://www.theage.com.au/news/Science/Hobbits-locked-away-as-scientists-argue/2004/11/25/1101219679777.html?oneclick=true
4) Deborah Smith "
Hobbits? We've got a cave full" 6th December 2004
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