traducido por Adela Kaufmann

(version original)

 

Una antigua ciudad, densamente poblada en Pakistán, fue destruida instantáneamente, 2000 años antes de Cristo por una increíble explosión que sólo pudo haber sido causada por una bomba atómica.

 

Ésa es la conclusión de un investigador británico, David Davenport que se pasó 12 años estudiando las antiguas escrituras hindúes y la evidencia en el sitio dónde la gran ciudad - Mohenjo Daro estuvo alguna vez de pie.

Lord David William Davenport (izquierda)

con Ettore Vicenti (derecha), en Pakistán

 

Lo que se encontró en el sitio de Mohenjo Daro corresponde exactamente a Nagasaki, declaró Davenport, quien publicó sus sorprendentes resultados en un asombroso libro "Destrucción Atómica en el 2000 B.C." (Milán, Italia, 1979). Había un epicentro como de 50 yardas de ancho, donde todo fue cristalizado, fundido o derretido, dijo.

A sesenta yardas del centro, los ladrillos están fundidos en un lado, indicando una explosión. El horrible y misterioso evento de hace 4,000 años, que derribó Mohenjo Daro, fue grabado en un antiguo manuscrito hindú llamado Mahabharata, que ha sido custodiado por santos varones durante siglos:

Humo blanco caliente, que era mil veces más luminoso que el sol subió en brillo infinito y redujo la ciudad a cenizas, se lee en el relato. El agua hirvió ...caballos y carrozas de guerra fueron quemados por los miles.. . los cadáveres de los caídos fueron mutilados por el terrible calor, tanto que ya no parecían como seres humanos...

La descripción concluye:

'era una vista terrible de ver... nunca antes hemos visto un arma tan terrible.'

Basado en sus estudios de muchos manuscritos antiguos, Davenport cree que el fin de Mohenjo Daro estaba vinculado a un estado de guerra entre los arios y los mongoles. Los Arios controlaban regiones donde alienígenas espaciales minaban minerales y explotaban otros recursos naturales, cree él.

 

Porque era una ciudad mongol, los alienígenas habían estado de acuerdo en destruir Mohenjo Daro en nombre de los arios. Los alienígenas necesitaban la amistad de los reyes arios para poder continuar con su búsqueda e investigación, explicó Davenport.

Ruinas de Mohenjo Daro

 

Los textos nos dicen que a los 30,000 habitantes les dieron siete días para evacuar – una clara advertencia que todo estaba por ser destruido. Obviamente, algunas personas no consideraron la advertencia, porque en 1927 fueron encontrados 44 esqueletos humanos allí, sólo unos años después de que la ciudad fue descubierta.

 

Todos los esqueletos estaban allanados a tierra. Por ejemplo, se encontraron un padre, madre y niño allanados en la calle, con la cara hacia el suelo, todavía sosteniéndose las manos. Interesantemente, los textos antiguos se refieren repetidamente a los Vimanas, o carros volantes que vuelan con su propio poder, agregó.

La intrigante teoría de Davenport se ha encontrado con intenso interés en la comunidad científica. El nacionalmente conocido especialista William Sturm dijo:

'la fusión de ladrillos en Mohenjo Daro no podría haber sido causada por un fuego normal...'

El Profesor Antonio Castellani, ingeniero espacial en Roma, agregó:

'es posible que lo que pasó a Mohenjo Daro no fuera un fenómeno natural...'




Nota Breve

Mohenjo-Daro y Harappa, Pakistán:

David Davenport (1996), quien pasó 12 años estudiando las antiguas escrituras hindúes y la evidencia en el sitio antiguo de Mohenjo-Daro, declaró en 1996 que la ciudad fue instantáneamente destruida alrededor del 2,000 A.C. Las ruinas de la ciudad revelan el epicentro de la explosión que mide 50 yardas de ancho.

 

En esta ubicación, todo estaba cristalizado, fundido o derretido. A sesenta yardas del centro, los ladrillos fueron fundidos de un lado, lo que indica una explosión… el horrible evento misterioso de hace 4,000 años fue grabado en el Mahabharata.

 

Según ese texto,

“humo blanco, caliente, que era mil veces más luminoso que el sol subió en infinito brillo, reduciendo a la ciudad en cenizas. El agua hirvió… caballos y carrozas de guerra fueron quemados por miles… los cadáveres de los caídos fueron mutilados por el terrible calor por lo que ya no se veían como seres humanos…”